Según Nietzsche, no existe una "verdad" única, sino una pluralidad de perspectivas sobre las cosas. Kant, por su parte, señala que no estamos revelando la esencia de la verdad, sino únicamente algunas características del concepto.
Partiendo desde el acto de elogiar a una amiga que se ve muy bien, incluso cuando no es así, porque sabemos que está atravesando un mal momento, nos enfrentamos a la cuestión de si podemos ser 100% sinceros. Y volvemos a la pregunta inicial: ¿Cuál es la verdad? ¿Decir lo que uno piensa equivale a la verdad? ¿Pensar en un ex de vez en cuando y no comunicárselo a tu pareja es mentir? Pero estos análisis aún me parecen demasiado simples. Mi pregunta trasciende a la relación de pareja, a la familia e incluso a los amigos. Mi pregunta es si vivimos la vida siendo sinceros con nosotros mismos, expresando nuestras opiniones de manera genuina, hablando en voz alta cuando es necesario, y compartiendo lo que hemos aprendido del pasado. ¿Acaso no nos autoengañamos a veces al pensar que no somos egoístas o al negar nuestra propia culpabilidad, culpando al otro por no actuar de la manera que creemos que es la correcta según nuestra perspectiva?"
