Ir al contenido principal

Un Blog para el alma

Acabo de crear este Blog, con el fin de que cada idea, pensamiento, o criterio (que valga la pena o no), se escriba precisamente en este espacio que esta ocupando estas palabras.

Pues bien, al principio, creí que una "fuerza" asaltaría mi mente y dominaría mis dedos, con tanta fluidez que  escribiría cual hippie entusiasmada por su viaje, Pero la realidad al contestar la pregunta que algunos compañeros "emprendedores" me hacen:

- oye tienes blog?

 suelo respirar hondo y en ese segundo de aceptación, reflexiono en el hecho de que no tengo nada en él que podría difundir, que vendría  a ser lo mismo en no tener nada!! porque aquella "iluminación" no me viene. (no digo que esta sea una) en fin, concluí, que debo escribir algo,  no <<cualquiercosa>> algo y al pasar el tiempo veré lo escrito y habrán dos reacciones: de risas o de mas risas.

 Cómo puedo aprender si nunca lo intento, y si no lo intento, quien me dirá un "vete al diablo" o un "vakan" o alguna reacción. Lo peor de hablar bien o mal de ti es que no hablen, decía un escritor que vagaba por la vida.


Un blog para el alma, de esta mujer que a veces no encaja en este mundo o muchas veces lo logra y es peor.

He visto mis intentos fracasar, mucho antes de haberlos publicado, tengo como 5 archivos sin terminar, porque tengo la vana idea que escribir es como un sentimiento, creemos que no lo podemos dominar, que ellos surgen de la nada y son como el caballo que lleva el carruaje y adivines quién lo maneja.

 Escribir es una decisión, no surge a menos que tu quieras, no trasciende a menos que no escribas muros y los rompas.

No quiero tampoco que sea mi blog un muro de lamentos, o mucho menos consejos de "aprenda los 5 pasos al éxito". <<Ojo al cristo, que se desclava>> decía mi madre, y le ponía muy buen OJO, uno nunca sabe si de ahí se baje y se las cobre por lo que le hicieron.

Esto de la maldad humana se mide en  grandes proporciones y ahí se dan duro con la estupidez, la verdad que no podría decir cual es mas grande.

Escribir!!! señores y señoras,escribir puede ser muy relajante, constructivo y satisfactorio, yo lo intento cada día, y aunque no sea la mamá de los escritos pues en la practica aprenderé, o quien sabe, un samaritano bloguero me pasará uno que otro consejo
(que sea Juan Fernando Andrade que sea Juan Fernando Andrade) que claramente serán bienvenidos.




El alma, necesita también contar su punto de vista....








Entradas populares de este blog

Salí nadando

 Manabí, Ecuador   “Siempre que visites un mar, debes preguntar si se puede nadar en él”. Alguien me dijo eso como conocimiento básico de la vida, uno que no tenía, pero que ahora tengo después de que casi me llevara el mar de San Lorenzo. Cinco amigas de paseo, una de ellas extranjera, Kate. La conversación en el automóvil nos reveló que en su país de origen, Kate era una excelente nadadora; cruzaba los caudalosos ríos de su estado como algo común. Yo, en cambio, había aprendido a nadar por los consejos de mi hermano menor o por lo que yo misma me había enseñado en las piscinas de complejos deportivos. El mar para mí no estaba a la vuelta de la esquina como sí lo estaba para mi mejor amiga Clara, quien me había invitado a este paseo. El mar siempre se veía como un dios, como una diosa, poderoso, imponente. Decidimos entrar al agua Kate y yo. La playa estaba casi vacía, lo atribuimos a que era un día entre semana, nada que nos llamara la atención. Nos internamos gozosas de sen...

Para ti de mi

Hay lugares a los que uno no vuelve, y personas de las que no se regresa.   Está claro que a quien más fallamos es a nosotros mismos. Nos mentimos, procrastinamos, no nos cuidamos, no soportamos la soledad, nos invaden pensamientos obsesivos, no comemos bien, no hacemos ejercicio... y la lista sigue. Cuando era niña, vivía en un lugar que me parecía maravilloso, cerca del río, y tenía un gran amigo: un enorme samán. Disfrutaba del río, de mis momentos de juego en soledad y de regresar justo antes de que anocheciera, cuando comenzaba esa sensación de que alguien te observaba. No tenía más responsabilidades que jugar, hacer tareas y limpiar la casa. Esos eran mis compromisos de niña. Ahora, tengo muchos pendientes. Podría convertirme, sin querer, en un alma en pena, como esas que no cruzan a mejor vida porque no logran resolver sus asuntos terrenales. Podríamos decir que caminamos por la vida como asuntos pendientes, mirando el celular en busca de videos que nos distraigan de lo desa...

Juguemos al juego de confiar

Volvamos al momento en que me dijiste: confía en mí. Confiar en el otro es lanzarte sin paracaídas . Es un acto de fe, de otorgarle a alguien la capacidad de conocer tus secretos, de expresarte cómo te sientes, o simplemente dejarte ver con todos tus errores, sin temor a ser juzgado. No juzgar es algo muy difícil. Emitir un juicio de valor cuando alguien en quien confías rompe alguna norma que tienes sobre la confianza, el amor, el respeto o la amistad puede ser inevitable. Para cada persona, estas palabras —amor, respeto, amistad— tienen significados distintos. Cada quien les otorga valor según su experiencia. Como dice la frase: "Cada ser es lo que hace con lo que hicieron de él". Y ahí surge una maraña de emociones y contradicciones, porque la realidad de uno nunca es igual a la de otro. En fin, no quiero sobrepensar este tema ni irme por las ramas. Lo que busco es escribir para resistir esos momentos en los que la vida no tiene sentido. Hay cosas que se quedan contigo, si...