Lección casi aprendida.
Es agotador pensar siempre en el otro, a g o t a d o r me desgasto siempre en pensar más en la otra persona que en mí.
Es agotador pensar siempre en el otro, a g o t a d o r me desgasto siempre en pensar más en la otra persona que en mí.
No puedo resolver la vida de los
demás, sobre todo de los que me importan, sobre todo de los que causan en mí
una emoción linda, un buen sentir, los que me quieren bien, sobre todo a ellos
les debo excluir un poquito, pensar en mí, llenarme, hacerme mimos, sentirme
por dentro, calmarme, arrullarme, debo pensar en mí, en mi primero.
¿Cómo
puedo ayudar a otros si yo estoy en plena construcción de mi misma? eso cansa. Eso no me deja seguir adelante.
No sé cómo empezar, si tienen
alguna idea en serio quisiera conocerla, quisiera leer un manual, un paso a
paso, yo lo haría al pie de la letra, se los juro, pero ya no quiero volver a
pensar en alguien más que no sea en mi primero.
Oye, créeme que
estoy hablando en serio, si debo dejar de ver a esas personas en las que pienso
más que en mí, las tendré que dejar, por un tiempo, hasta encontrarme.
Ahora:
quiero un abrazo,
un beso
un todo estará bien
una sopita de enfermo
un chocolate
una canción
un gran mimo
alguna cosa que no tenga ahora...